Llega la moda de los Baños Parafina

Si alguien te menciona baños de parafina y no estás ligado al mundo de la fisioterapia, te quedarás igual que yo cuando me lo recomendaron la 1º vez para un familiar.

Pero una vez me informé sobre este producto, encontré un sinfín de información acerca de los múltiples beneficios que aporta cuando sufres problemas musculares, artrosis, artritis, tendinitis, contracturas o afecciones reumatológicas. Además de añadir un valor extra aportando hidratación y suavidad a la zona tratada.

Al principio, dicha información me llevaba hasta consultas de fisioterapias y rehabilitación, donde son muy utilizados. Pero hoy día podemos encontrar productos los cuales te permiten realizar el procedimiento en tu hogar, evitando salir de casa y pagar a una persona para realizar el tratamiento. Pero… ¿qué es la parafina y en que consiste el proceso?

¿Qué es la parafina y en que consiste el proceso?

La parafina es una cera que se obtiene de la destilación de petróleo, empleada para generar calor, para ello es calentada en un recipiente hasta punto de fusión (alcanzando entre 45° y 55° C). Puedes encontrar actualmente ceras parafina con agradables fragancias.

El tratamiento se inicia recomendando aplicar crema de manos con lanolina en las zonas que se van a tratar. De esta forma se conseguirá un mejor resultado y se podrá retirar más fácilmente la cera después del tratamiento.

Sumergir el miembro a tratar durante unos segundos y repetir el proceso 6 y 7 veces con la cera ya caliente. Una vez impregnada la zona tratada, acto seguido cubrimos la zona con una toalla y esperamos unos 15 minutos para que se enfríe y conseguir una capa sólida e impermeable.

Hay que detallar que si la zona a tratar son manos o pies se deben separar bien los dedos para cubrir bien toda la superficie.

Una vez trascurrido el tiempo, se retira la cera parafina con suavidad, y se procede a dar masajes a la zona con una crema hidratante.

Recomendaciones de uso

Evitar su uso personas con diabetes, heridas o úlceras, varices, con afecciones en la piel como dermatitis o piel sensible.

Limpiar la zona a tratar y secar bien para asegurar que no haya humedad en la piel.

Tener una postura cómoda al realizar del tratamiento y retirar joyas y prendas metálicas.

La parafina es material combustible que no puede estar en contacto directo con fuego.

Sus beneficios

Es un excelente hidratante, ya que humedece la piel a niveles profundos.

La parafina permite que se retenga el calor en la zona afectada, y la humedad que se forma internamente nutre las capas de la piel y relaja los músculos.

Ayuda en el tratamiento de dolores musculares, contracturas, artritis, entre otros.

Es muy utilizada en tratamientos cosméticos de pedicura y manicura, para lucir una piel sana y suave.

Ayuda en problemas circulatorios porque el calor actúa como vaso dilatador aumentando el flujo sanguíneo.

Es muy utilizada en procedimientos de fisioterapia y rehabilitación.